Ayer 13 de abril, con muchos miles de manifestantes en las calles de las capitales vascas, los pensionistas volvimos a demostrar el poder de nuestra unión. Les recordamos a los políticos nuestro poder en las urnas, y que no se lo cederemos a aquellos políticos que no trabajen por unas pensiones públicas dignas hoy, por unos sueldos dignos y por unos impuestos proporcionales a los beneficios, que puedan costear públicamente las pensiones futuras.
Si los políticos saben lo que les conviene, harán caso del auténtico poder, el de las personas unidas defendiendo su derecho a una vida digna y defendiendo la Tierra que nos da la vida frente a los que arrasan la Tierra y maltratan a sus habitantes a cambio de unos estúpidos números bancarios.