Estos días de febrero de 2025 las noticias más llamativas son las decisiones de Trump de poner aranceles grandes a todas las importaciones de USA, especialmente desde los países que le caen mal a ese paranoico. Estoy en contra de las ideas de los nazis, xenófobos y racistas como Trump, pero veo algo bueno en el freno al comercio internacional que puede empezar con sus aranceles.
Pienso que el nivel tan alto de transporte de mercancías actual es insostenible por varios motivos:
- Se esquilman recursos que después de usados no vuelven al origen.
- Se consume mucha energía en transporte, casi por completo mediante combustión, con el consiguiente aumento de CO2 en la atmósfera, impulsando el calentamiento global.
- Los lugares de consumo de esos recursos emiten grandes cantidades de desechos que no se reciclan y que contaminan.
- La población se concentra en los países que reciben los recursos y se enriquecen, realimentado con sus necesidades el transporte de recursos y la producción de basura sin reciclar.
- Los países que generan los recursos se empobrecen porque los países que los reciben pagan poco por ellos, y lo pagan solo a las élites, no a la población.
- La gente empobrecida de los países esquilmados se ve obligada a emigrar a los países receptores de los recursos extraídos.
Este círculo vicioso está llevando al límite a la capacidad del planeta de sustentar tantos seres humanos. Llegado este límite solo nos queda decrecer. Si no decrece el consumo por habitante, decrecerá el número de habitantes, quizá dramáticamente, mediante guerras.
Me parece que se debería frenar, quizá con aranceles altos, este exceso de exportación/importación. Al mismo tiempo creo que se debería dar total libertad de emigrar, para que sea la gente la que se mueva a los lugares que producen alimentos, que es lo natural en los animales, que son los que tienen capacidad de moverse a donde las plantas, inmóviles, producen esos alimentos.