viernes, 19 de febrero de 2021

Necesidad del localismo con buenas comunicaciones y solidaridad

Los efectos del cambio climático son cada vez peores, y tienen más consecuencias cuando se depende de suministros remotos. Por ejemplo, en la última tormenta de frío en Tejas, millones de personas quedaron sin suministro de electricidad, y muchos también sin agua y con dificultades para abastecerse de alimentos.


Viene a cuento la siguiente noticia científica:

https://phys.org/news/2021-02-ancient-relic-earth-history-years.html

Resumiéndola:

A partir de los anillos de crecimiento de un tronco de árbol bien conservado, datan en 42000 años una inversión de los polos magnéticos terrestres que causó extinciones, debido a que durante la inversión el campo fue tan débil que no protegía de la radiación externa.

Posiblemente este evento provocó que los humanos buscaran refugio en las cuevas y usaran protectores solares, lo que quedó reflejado en la aparición repentina de arte rupestre, en el que abundan siluetas de manos hechas al soplar pintura, la cual pudo servir de protector solar.


Actualmente el polo magnético norte se mueve con rapidez y el campo magnético se está debilitando, lo cual apunta a una inversión del campo magnético terrestre en un futuro próximo (a escala geológica). Nuestro sistema de vida, basado en tecnologías muy sensibles a la radiación externa (satélites, tendidos eléctricos,...) sería dañado seriamente si ocurriera un debilitamiento del campo magnético terrestre similar al que ocurrió hace 42000 años.


Por el riesgo de eventos de mucha radiación externa, entre otros motivos, pienso que no deberíamos ser muy dependientes de redes de comunicación basadas en satélites, ni de grandes redes de suministro eléctrico. En su lugar, habría que potenciar medios más locales y sustituibles con facilidad, tanto para comunicación como para producción de energía eléctrica.


En las comunicaciones, se podrían sustituir las constelaciones de satélites por drones estratosféricos con energía solar. Cada uno de estos drones se mantendría a más de 20 km de altura, dando servicio en un radio de cientos de km. Podrían conectarse entre sí para formar una red global. En caso de que hubiera tormentas de radiación los drones podrían volver a tierra a protegerse, algo imposible para los satélites. 


Usar combustibles almacenados localmente es una buena medida para no depender de redes de suministro. Pero estos combustibles deben proceder de fuentes renovables. Si contienen carbono, este debe tomarse del CO2 del aire, para reducir el efecto invernadero. Además debería alcanzarse mucha más eficacia que con la combustión. Por ejemplo mediante células de combustible.


Habiendo recursos locales, cada región está más protegida frente a situaciones catastróficas. Eso no va en contra de que las distintas regiones se ayuden entre sí en cuando haya una zona más dañada que el resto. En ese caso, las reservas de las zonas vecinas se compartirían mediante una red de suministro que habría que mantener en buen estado entre todos.