domingo, 22 de septiembre de 2019

Una idea para enfriar el planeta desde el mar

Idea para evacuar calor terrestre, y a la vez obtener energía eólica, mediante estructuras flotantes altas.

Estos días se están produciendo huelgas y manifestaciones, en las que participo, exigiendo que se actúe contra el calentamiento global. Pedimos que se actúe, teniendo en cuenta los exhaustivos estudios de los científicos y las evidencias que observamos todos a diario, para evitar que lleguemos a una situación incontrolable que se va a realimentar a si misma, contra la que no podremos hacer nada dentro de pocos años. Lo más razonable sería que dejásemos de usar la combustión de carbono y sus compuestos casi inmediatamente, y que sustituyéramos los combustibles por energía eólica y solar. Pero por muchas manifestaciones que hagamos, sabemos que no se va a reducir la emisión de CO2 a tiempo de evitar el desastre global. Por eso hacen falta soluciones inmediatas que puedan enfriar el planeta. Una de esas soluciones ya nos la sugiere el aumento, debido al calentamiento global, de las grandes tormentas que producen inhundaciones en las zonas costetas.

Las corrientes de aire verticales quizá sean el medio más eficaz de evacuar calor de la superficie terrestre hacia el espacio exterior porque exponen el aire caliente al espacio por encima de las capas más aislantes, las inferiores, que están cargadas de gases de efecto invernadero. Estas corrientes son raras de forma natural. Lo más habitual es que el aire caliente ascienda lentamente mediante corrientes en espiral con un radio de decenas a miles de kilómetros, en las zonas de baja presión o en borrascas. Sólo en las tormentas repentinas el movimiento vertical es rápido. Estas tormentas precisan de alguna irregularidad que las inicie, que favorezca movimientos verticales, por ejemplo cuando se forman "nubes orográficas" por el ascenso de aire húmedo al encontrarse el viento contra una montaña. En el mar, al no existir irregularidades en su superficie, no se producen nubes orográficas.

Lo que propongo es la construcción de estructuras flotantes, de unos 100 m de altura, con un perfil semejante al de un volcán, con pendiente suave en la periferia y vertical en el borde del cráter. Sería hueca, para que pueda flotar apoyada sobre flotadores cilíndricos verticales repartidos por toda su base. Para darle estabilidad, la base de los flotadores, a más de 10 m de profundidad, estaría unida a una plataforma delgada, que evitaría los movimientos verticales.
Una estructura así redirigiría algo del viento de la superficie hacia arriba, transportando humedad, que se enfriaría y condensaría el vapor de agua. El aire frío bajaría completando una célula de convección que se alimentaría contínuamente del calor del agua superficial. Como el viento sería constante, se podría obtener energía eólica instalando aerogeneradores sobre los flotadores de la periferia. Para transportar esa energía a tierra se podría extraer CO2 del aire, combinarlo con agua y producir materia orgánica (por ejemplo glucosa) y oxígeno que se liberaría al aire, como hace la fotosíntesis de las plantas. La materia orgánica se transportaría en barcos a tierra, donde se vendería para financiar la construcción de más enfriadores marinos y para competir con mucha ventaja sobre los combustibles de origen no renobable.
La plataforma sumergida en la base serviría de soporte a mucha vida marina y sería un buen lugar para pescar.


"Nube orográfica"
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Nube_orogr%C3%A1fica