miércoles, 15 de marzo de 2023

Descontrol global inevitable

Los humanos somos capaces de resolver problemas muy difíciles, siempre que no salgan de nuestro entorno más próximo. Podemos cultivar y guardar alimento, o construir casas para ser en cierta medida independientes de los eventos naturales. Incluso podemos influir positivamente en nuestra comunidad más cercana, en el barrio, el municipio, e incluso en nuestra nación si es pequeña. Pero somos incapaces de controlar positivamente a nivel global. Nuestras capacidades personales ha evolucionado desde la prehistoria para controlar lo más cercano, seleccionando los más capaces. Esa capacidad no es suficiente para mantener habitable y en paz el planeta entero.


Vemos cómo progresa sin parar el calentamiento global y todas sus consecuencias sin poder hacer nada para remediarlo. Vemos cómo el enfrentamiento entre grandes potencias nos llevará a otra guerra mundial cuando las armas son más destructivas, y no lo podemos parar. No hay experiencias previas a esta escala de las que aprender, así que si sale algo bueno de esta situación será inevitablemente después de un desastre global inevitable que elimine gran parte de la población humana por medios naturales y por guerras.

No parece que haya un genio que pueda solucionarlo. Ni aunque se pongan de acuerdo todos los genios del mundo, ni así podrán parar la marcha a la autodestrucción de una humanidad superpoblada que destruye simultáneamente en pocos años el entorno en que ha evolucionado y hace inhabitable el planeta para casi toda su especie.